La 3.a partida del Campeonato de Ajedrez (masculino) no tuvo los altos y bajos de las partidas anteriores. Las blancas de Caruana van entrando en confianza y se fueron por el camino seguro, casi directo a las tablas. Paradójicamente este campeonato denota más hambre del campeón que de su contendiente.
Como mencioné en un artículo anterior será imposible que algún bando tome ventaja en posiciones cuya igualdad se basa en factores casi simétricos. Esperar un error fatal del contrario, con más de 2800 ELO, es ilusorio. Es necesario provocar asimetrías que, aunque no marquen desequilibrio, denoten compensaciones y caminos de victoria. Sólo así, se puede esperar que, en las presiones de tiempo y el nerviosismo consecuente, el oponente falle, tropiece y caiga en el camino.
La posición de abajo espera el movimiento 18 de Carlsen.
La columna-a no puede ganarse por ningún bando. Tampoco la posición dominante de la Dama blanca podrá sostenerse ante el esperado 19…b5. La presión que ejerce el blanco sobre e5 se supera fácilmente. Por esto, aunque hay cierto predominio blanco, éste no es tal como para vislumbrar ningún camino de distanciamiento.
Tras el esperado 19…b4 y la desaparición de las piezas mayores, inducida por el propio Caruana, la partida no daba ya para más.
Esta posición no ofrece ninguna perspectiva ni plan ganador. Más adelante, Carlsen creyó que podía estirar más la presión cuando los peones blancos del flanco de rey se ubicaron en las casillas negras f2-g3-a4, pero esto fue ilusorio.
Por fin, cuando la posición se estaba separando de la simetría:
Las blancas lograrán eliminar todos los peones negros sobrantes aún a costa de su caballo, mediante f4 y más tarde f5 y Cxc4, con unas tablas teóricas, pues el peón en h5 negro nunca podrá coronar, siendo el alfil negro del color equivocado a la casilla h1.
Al final, paz en la Tierra…
La partida de mañana brinda la ocasión a Carlsen de desprenderse de la mala impresión de la segunda partida para demostrar algo con las blancas. Con la agresividad y el empuje que le caracterizan sabemos que no dejará escapar ninguna oportunidad para tomar la delantera. Ya veremos.